Guillermo, Co-fundador, amigo y familiar de personas autistas, siendo el mismo también una persona dentro del espectro, fue quién identificó la creciente necesidad de un espacio que pudiese ayudar a familias y amigos que carecían de una institución que pudiese entregar atenciones de salud mental y terapéutica, a bajo costo y dentro de la comuna donde nació y ha vivido toda su vida, institución que a él también le hizo falta durante su infancia y desarrollo, redactando un proyecto que el día de hoy ya es una realidad.
Todo partió con la frase “Hagamos algo al respecto”. Posterior a dicha frase comenzó un proceso largo, un gran trabajo en conjunto por crear un lugar que fuera capaz de albergar y cubrir todas las necesidades, pero ya no de nosotros mismos, si no de todas aquellas familias, todas aquellas personas de nuestra comunidad que están pasando por alguno de estos procesos, todos aquellos que están recién iniciando, y para todos aquellos quienes llevan tiempo luchando, pero que deben luchar fuera de nuestra comuna, debido a la falta de una lugar como Fundación Casa Colores.